Mucha gente se pregunta cómo reclamar daños a un vecino en caso de que su vivienda haya resultado afectada por los problemas de una propiedad colindante en proceso de reforma o construcción.
Bien, a continuación, te hablaremos del proceso que tienes que seguir con todo detalle, ya que hay un procedimiento amparado por la ley (art. 1902 del Código Civil) que puede ayudarte a recibir una contrapartida por tus gastos.
Reclamar daños a un vecino: cómo hacerlo
Lo primero es lo primero: debes encargar un informe técnico que refleje por escrito el alcance de la reclamación de manera precisa en un momento temporal concreto.
Sus características no pueden cambiar en ningún caso, salvo por el incremento de los daños ocasionados por la incidencia en tu vivienda.
Este documento, la carta de reclamación de daños materiales, ha de estar dirigido a la atención de todas las partes que intervengan en la obra colindante.
Claro está, en el momento de la redacción de esta carta, no estarás al tanto de quienes son los encargados de la construcción o la vinculación con otras empresas. Más adelante se derivará esa responsabilidad; es decir, al conocer bien las condiciones en las que se desarrolla la obra.
Así, una reclamación de daños estándar debe contener la siguiente información:
- Dirección del edificio en obras.
- Dirección de la vivienda afectada.
- Detalle de los daños ocasionados.
- Estimación monetaria de la cuantía de los daños.
- Informe técnico adjunto.
El plazo de reclamación es de un año y tiene carácter prescriptivo.
En este sentido, es muy importante que pongas en contexto temporal las roturas y establezcas con precisión la fecha en la que aparecieron.
Posibilidad de que existan discrepancias
En la mayoría de casos, el responsable de los daños se pone en contacto con el afectado. Si es así, puede que este no comparta tu opinión sobre el origen de la incidencia y el alcance de los daños. Se trata de discrepancias que pueden alcanzar, incluso, a la estimación económica de estos.
También pueden darse en torno a la propia responsabilidad o sobre la afectación indirecta de diferentes áreas de la propiedad.
De ahí la relevancia de enviar un burofax de reclamación de daños. En caso de que no estéis de acuerdo, desde el principio tendrás una base fija de reclamación ante un tribunal. Y quedarán claras tus demandas, a pesar de que el posible responsable no esté de acuerdo.
Como ves, reclamar daños a un vecino no es tan difícil. Tan solo has de ser escrupuloso en la redacción de la reclamación y en el detalle de su alcance.
Por otro lado, la celeridad con la que curses tu demanda es otro factor crucial, ya que, si no te haces cargo a tiempo, la magnitud de los daños puede verse agravada.
Así que si necesitas ayuda legal con la reclamación de daño a un vecino, puedes contactar con nosotros sin compromiso. Somos abogados especialistas en derecho inmobiliario y hemos resuelto muchos casos de este estilo.